miércoles, 28 de abril de 2010

LA CRUDA VERDAD

Ya nos despachó Juan, nos trasladó de habitat Mariano… qué nos estaba faltando?! Ah, sí, claro… que nos desilusione Agustín, que más!
Para que mi triángulo desamoroso termine de desarmonizar por completo, dejé para el final el “welcome home” con el que me desayunó el papurri…
¿Recuerdan que ya encerraba sus misterios antes de mi partida?... bueno, al regresar, se ve que se le dio por develarlos como si nada…
Primer día de oficina: me saluda cordialmente, parecidísimo a ese Agustín del principio, correcto pero distante… al comienzo sospeché que era debido a mi onda con Mariano, pero después caí a cuentas de la realidad, que casi siempre es a la inversa de lo que yo me imagino…
En nuestro reencuentro de footing, se soltó un poco más… y yo hubiese preferido que se quedara callado!
No puedo poner literalmente lo que me dijo, no puedo repetir sus palabras, sus expresiones… lastimó demasiado! Puede que suene a mucho, quizás sea poco, o nada… pero qué importan las cantidades cuando se trata de dolor?!
Agustín tiene novia. Hace dos años. No parece muy enamorado. Qué importa. Agustín tiene novia. Ella vino del interior a vivir a Buenos Aires sólo por él. Eso a él le pesa. Se le nota. Que importa. Que se joda. Agustín tiene novia. Se lo tenía bien guardado. Por qué sería? Que importa. Agustín tiene novia.
Auch… it hurts!
“Voló, voló mi destino / Duró mi vida, un instante / El cruce de los caminos / y tu dulzura distante”…

martes, 27 de abril de 2010

AMIGOS SON LOS AMIGOS

Sé que voy perdida en el tiempo de la “blogansiedad”, sepan disculparme, ando con mucha cosa en la cabeza y me cuesta ordenarme para escribir…
En mi última publicación desapareció Juan de mi vida, pero apareció Mariano…
Mariano que afloró como un oasis en el desierto en medio de mi vuelta a la oficina…
Como leyeron, durante mi descanso pensé mucho en el tema laboral, profesional… en el querer saber hacia donde ir… Y eso… hacia dónde?!
Así arribé al trabajo luego de las vacaciones… y el día a día en la obligatoriedad de acudir a un recinto del que quiero huir parecía colmado de tedio… cada detalle, cada persona… todo, menos Mariano…
Me dio una cálida bienvenida, como si verdaderamente estuviese contento de verme… Desde el vamos, me invitó a compartir anécdotas y fotos de los viajes de ambos; algo que acepté gustosa, sin falsas expectativas, sin dobles intensiones… sólo porque Mariano me cae re-bien, además de que está re-bueno, pero juro que pesa más lo primero que lo segundo, aunque lo segundo colabora… y cómo! Soy un cachivache yo también, a quién quiero engañar?!
La cuestión es que nos juntamos un día después del laburo, nos quedamos en un bar por ahí, tomando algo y añorando los días felices lejos del pelado y sus males… él con fotos impresas, yo con mi álbum en la laptop… nos pasamos horas charlando y riendo… y ya… eso fue todo… parecía haber algo más, pero… estaba difuso, muy…
Entro y salgo constantemente de hipótesis y teorías respecto a las reacciones de los hombres, hay miles, una se pierde en un laberinto sin fin, sin salida… Con ellos, todo puede ser… o simplemente, nada…
“Quizás no se anima a avanzarme porque somos compañeros de trabajo” / “Quizás no se quiere involucrar con nadie, porque acaba de salir de una relación conflictiva” / “Quizás no quiere ir rápido conmigo, porque de verdad le pasan cosas” / “Quizás no le gusto” / “Quizás me ve como amiga y listo” / “Quizás no se anima a encararme, lo intimida mi personalidad” / “Quizás es gay” / “Quizás está enamorado de otra” / “Quizás, quizás, quizás…”
La cosa es que no es tan simple… porque siempre atrás de los “quizás” vienen los “entonces, por qué?”… soy mujer, no puedo evitar analizarlo todo!
En fin, hubo más encuentros como esos con Mariano… además, empezamos a salir más en grupo, con nuestros amigos laborales, y conectamos super bien!
Nos reímos de los mismos chistes malos, criticamos la misma música, nos burlamos de las mismas personas… no actuamos como amigos, pero tampoco como “te chamuyo y después te entro”… A veces se nos cruzan las miradas y las sostenemos largo rato, fijamente, y a veces nos escabullimos enseguida de los ojos del otro… Yo cada dos por tres quiero comerle la boca, pero si eso implica que, más luego, desaparezca, me quedo sin los besos pero con la presencia, con el estar… Mariano me hace bien, eso es!
Así estaba nuestra relación al momento de suceder el acontecido de la publicación anterior…
Esa noche, al entrar a mi departamento dudé una y mil veces en llamarlo, o mandarle un mensaje… pero, no supe qué decir! Quería enojarme con él por su abandono repentino o que me escuchara lamentarme por la situación con Juan?! Prefería que él se hubiese quedado por quedarse conmigo o por darle celos al otro estúpido?! Muchas preguntas, ninguna respuesta convincente para el horario y el estado de mi persona… así que, a consultar cada fragmento con la almohada…
La almohada chota no largó prenda, no me regaló esperanzas ni ilusiones, no desenmarañó la telaraña en mi cabeza, siquiera me dio un buen descanso! La tengo que tirar urgente y comprarme una nueva!
De cualquier forma, nos cruzamos en el trabajo, y lo aparté para charlar… intenté que fuese una conversación normal, sin entrar en mucho detalle de lo ocurrido, pero tratando de obtener una respuesta a su ida algo furibunda… intenté, digo, porque mi anormalidad genética no me lo permitió… yo siempre tengo que rozar el absurdo!
Fue complicado desde el principio, ya que Mariano actúo como si anoche nada hubiese sucedido, como si toda la parafernalia de la charla amiguista, de las risas y sonrisas, del hombro prestado, del llanto y del resto – partida + enojo incluidos -, no hubiese existido salvo en mi mundo paralelo… como si para él hubiese sido una especie de picadura de mosquito, algo insignificante… Horrible!
O sea, que arranqué sintiéndome una idiota… después, solita, de puro esfuerzo que hago yo por ser cada día un poquito más patética, me puse a explicarle el episodio con Juan… le di explicaciones a alguien que no me las estaba pidiendo, y que no le estaban importando en lo más mínimo!!
Cuando terminé de catapultarme al ridículo total, Mariano me apoyó una mano en el hombro y me dijo: “Está todo bien, no tenes que justificar tus elecciones, yo como amigo, te puedo decir que ese tipo, por lo que me contaste, no me gusta para vos, no te conviene… pero, es tu elección, sos una mujer, ya… tenes que hacerte cargo de lo que elegis. Yo creo que hay algo mejor ahí afuera para vos, que ya va a llegar… solo que vos lo queres ya, de puro ansiosa! Fluí, Manuela, fluí un poco…”.
Mandíbula abierta, ojos fuera de orbita… qué se hace en estos casos?! Me quedé callada, hice un ademán con la cabeza, como dando cuenta de que escuché lo dicho… y emprendí la retirada…
Analicemos:
uso la mala palabra: amigos… agggggggg, me da escalofríos!
plus empeorativo: pretende ser un buen amigo, de esos que te dicen la posta!
me hizo ver el hecho de que ya soy grande y debo vivir con las consecuencias de mis actos… qué novedad! Y quién dijo que yo quería eso?!
me dio la impresión que me conoce demasiado y que sabe lo que necesito… pero no me lo va a dar él, claramente…
Conclusión:
me cagó la tarde…
Mi estigma me persigue…
César Banana, musicalizá, musicalizá querido:
“No quiero ser tu amigooooooooooooo, amigos nunca másssssssss, amigos para qué...”

jueves, 15 de abril de 2010

ADIOS, ROBERTO… O JUAN…

A un par de días de volver, me conecté al MSN y estaba Juan, como “ausente”… (ejue!) Me puse “disponible” algo que casi nunca hago (es más, casi siempre estoy conectada como “desconectada” y hablo con quien yo quiero… ahora que leo todo esto de los estados del Messenger, son para terapia, eh?! Y parecían tan superficiales ellos…), sigo, ahí estaba yo, entonces, con mi cartelito en la frente de “se regala / desesperada” y el señorito nada de nada…
Una amiga que estaba online y al pendiente, me dio el envión necesario para animarme a dar el primer paso: “Hablale vos, boluda, sino sos siempre la que está esperando, disponible, de fácil acceso, cuando él quiere, pero vos no lo usas a él nunca?! Cómo es la cosa?!”… No es muy pedagógico lo suyo, pero la cagada a pedos llamativamente siempre tiene efecto en mi… Así que le hablé… No sé para qué mierda le hablé?!! Odio el MSN, además, porque todo da para libre interpretación, no hay tono de voz y a veces se crean confusiones y malos entendidos… un desorden! Y, para completarla, Juan contestaba todo con monosílabos… y yo prendí el carburador y allá me fui… La de conjeturas, hipótesis, conclusiones y demases que saqué de mi loca cabeza… Imposible no enroscarme! Terminamos quedando en que me llamaba en breve para vernos y charlar… Eso de charlar ya me dio para sospechar de acá hasta el día D… Mmmm, hay olorcito a barrida!
El fin de semana siguiente nos vimos. Ya que te diga de verse un domingo a la tardecita-noche… No hay mucho clima de nada! Ese día a esa hora es para las parejitas ya establecidas, que salen a dominguear… No para dos que hace rato no se ven, y se quieren ver bien de bien, y tocar y whatever… Para redondearla, el meeting no fue ni en su casa ni en la mía… Por primera vez, Juan y yo nos encontramos en un lugar público… Algún optimista podría pensar: “Bueno, finalmente, van a tener una cita como corresponde, de puertas afuera y no como si estuviesen de trampa”… Yo, a veces, puedo ser terriblemente pesimista, y ese atardecer me traía mal augurio…
Nos sentamos en una de las mesas que dan a las ventanas de la calle y mientras él analizaba con detalle la carta, yo me colgué a mirar hacia fuera… Densa la situación! Una aura rarísima flotaba en el aire… Yo sabía que era la última vez que lo iba a ver, lo supe desde el principio - sin ganas de caer en lo dramático…
Con la cerveza de por medio le conté de mis vacaciones, dejadamente, sin poner entonación ni alma a mis palabras, no me estaba interesando dar vueltas, yo quería que me dijera lo que había ido a decirme, nada más…
Esta vez, me puse yo monosilábica y no le quedó otra que arrancar con su parte del diálogo… o mejor dicho, monólogo, porque lo lanzó de un tirón, sin pedir permiso y sin pedir perdón: “Mirá, Meme… yo estuve pensando, en este tiempo que no nos vimos, que está bien eso… digo, tal vez, dejar de vernos, un tiempo, al menos, no sé… Es que yo… para mi es difícil, por los chicos, sabés? Yo quise hacer mi vida estos días y me empezaron a romper las bolas, qué que onda con vos, que te cuide, que no joda… me siento observado, presionado y no me gusta… Yo no quiero ataduras, compromiso con nadie… Y no quiero que esto se complique y después termine en cualquiera… Me cuesta decirte esto, porque lo paso genial con vos, muy bien, pero… no se trata de vos, entendes?! Soy yo el que no quiere lazos…”
Básico, tan básico!
Lo dejé hablar, sudaba como una mula, como si estuviese dando un examen oral el muy pelotudo! Mi mente no tenía stop… si hubiese dicho la mitad de las cosas que pensé… Y eso de caer en el bajísimo “no sos vos, soy yo”… Qué necesidad?! Gente grande… Tenía ganas de levantarme e irme, eso… Me molestaba tener que contestar algo a semejante idiotez…
“Esta todo bien, Juan. Me lo podrías haber dicho por teléfono también, no? O por mail, así me ahorrabas el viaje y el tener que verte la cara de nada mientras hablas estupideces.” Fui escueta, me puse de pie.
JUAN: “Pará, no me digas eso, no te enojes… como no te lo voy a decir frente a frente, además, no son estupideces, es lo que siento, lo que me pasa”
MEME: “Y a vos quién te dijo que yo tengo ganas de moverme un domingo, con lo que a mi me cuesta salir de mi casa los domingos, gastar un dineral en taxi y sentarme acá a escuchar tus sentimientos? Que no me están importando, por si no te diste cuenta”
Juan seguía en una postura borrosa, creía, por alguna razón, que me estaba haciendo daño con su declaración… Y, sinceramente, no era así…
A mi me podía doler el hecho de saber que no iba a verlo más, sin importar la razón… pero en cuanto me salió con este argumento me lo quise comer crudo… Sos un boludo importante, que andas haciendo o deshaciendo por lo que opinan los demás!!! Y eso bastó para que mi corazón se pusiera su coraza y nada de nada se filtra ahí dentro… Y sale el frigobar como loco!
Distancia, chau, nene… que la vida te sonría! Lo dejé sentado solo en la mesa, enterrado en su desconcierto… Me subí a un taxi y me largué a llorar…
El tachero me miraba por el espejo retrovisor, pero no me importaba… le di rienda suelta al llanto y me saqué todas las lágrimas del sistema… Nisiquiera sabía exactamente por qué estaba en ese estado de lamentación, pero sentí que era preciso dejarlo fluir…
En medio de un suspiro acongojado me suena el celular…
MARIANO: “Qué te pasó? Estás bien?”
Yo aún no había emitido sonido alguno, así que su pregunta insistente y preocupada me asustó un poco… Balbuceé algo así como que sí…
MARIANO: “No me mientas, Meme, acabas de pasar por al lado mío en un taxi, e ibas llorando desconsoladamente”
Me largué de nuevo a moquear, le pedí al taxi que diera la vuelta y me fui en busca de Mariano… Al llegar, lo abracé como si fuésemos amigos de años, con la cara desfigurada de andar llorando, hecha una piltrafita… un horror! Nos sentamos a tomar algo y me sirvió de oreja, pobrecito…
Es extraño, porque Mariano no es mi amigo, nunca establecimos nada cercano a ese vínculo… Y tampoco es que somos compañeros de trabajo a diario, compartimos tiempo dentro de la oficina, pero cada uno está en su área, no interactuamos rutinariamente… Y me gusta mucho, eso obvio, pero, no me comporto con él como lo suelo hacer con alguien que me gusta… como por ejemplo, hablar de otro tipo!
Pasé por todos los estados… la aflicción, la risa, la bronca, la ironía, el desconcierto… Mariano acotaba intentando levantarme el ánimo… Lo lograba casi todo el tiempo… Eso me gusta de él, que me hace reír, no pensar… Me repite una y otra vez: “Vos pensás mucho, no penses más”… Será cuestión de apagar la mente?! Hay algún disyuntor que no estoy encontrando?!
Yo quisiera no pensar demás, pero no me está saliendo… Se me acumulan los pensamientos como en un scrum de rugby y dale que te dale para un lado y para el otro…
Ya de madrugada, Mariano creyó pertinente alcanzarme a mi casa – yo estaba bien, entonada, un poco arruinada, pero bien, aún en mis cabales… Nos tomamos un taxi y durante el trayecto reinó el buen humor, la desgracia fue vista con burla y le hicimos pito catalán al desatino… Al llegar al la puerta de mi casa, la cosa cambió: sentado en el umbral del edificio, estaba Juan…
Hubo un momento de silencio, de sensación incómoda, que Mariano resolvió rápidamente, subiéndose nuevamente al taxi y dejándome ahí, en las garras del enemigo… Me pareció que se fue algo enojado, pero yo no estaba en condiciones de determinar nada… Juan, en cambio, no me dejó lugar a dudas, estaba que trinaba… Eh po qué?! Porque son de manuallllllllllll… me acabas de dejar, querido, no me hagas carita de escena de celos porque aparezco con otro hombre!!!
Se puso en posturita de reclamo, con los brazos en jarra como una abuela retona, y yo le pasé por al lado, como si fuese el mismísimo viento… Abrí la puerta y él la detuvo…
JUAN: “¿Dónde estabas? Me quedé preocupado por como te fuiste, y como un estúpido me cansé de llamarte, vine hasta acá hace un par de horas, dele tocar timbre, como un imbécil, que veo que soy, porque vos ni lerda ni perezosa ya estabas con otro chongo, y encima… que estás en pedo?!…”
Él se ve que pretendía seguir balbuceando cosas, pero lo interrumpí: “Shhh, Juancito… no me rompas las pelotas, tamos?! Vos haces tu vida, yo hago la mía… Escuché ya todo lo que tenías para decir y rescato dos grandes verdades de todo: sos un estúpido y un imbécil, es bueno que lo reconozcas”, y le cerré la puerta en la cara (lentamente, lo cuál no fue muy efectista, lo que pasa es que la puerta de abajo de mi edificio tiene esos sistemas de cierre para que no dés portazo… y yo ponía todas mis fuerzas, empujándola, una ridícula total!).
No miré atrás… me salió el personaje de Manuela La Orgullosa y lo mantuve hasta el final.
Una vez que entré al ascensor, me dejé caer al suelo… Ufa! Esas lágrimas malditas de vuelta! Odio a los hombres!!!
Tenés al que se hace el duro, el chico difícil, que no quiere estar con nadie, es un lobo solitario y blablabla… que es bipolar, y al rato, se te aparece en gesto romántico de telenovela, en la puerta… haciendo qué?! Qué pretendía al venir?! Confundirme, qué más?!
Y el otro?! Se hace el preocupado, el amigo y compañero incondicional, que te defiende y te cuida… y plum! De repente, te deja solita lidiando con el fardo, Poncio Pilatos! Tampoco sé que pretendía, no? Que Mariano se quedara a hacer qué?! Confundirme… lógico, qué otra cosa?!
Los hombres segregan confusión… y una anda cayendo por ahí, toda mareada!

REAL LIFE SUCKS!

“Nada más / puedo ser / el vaivén entre pasión y sacrificio / suelo andar / ya me ves / jugando al tentempié en el precipicio…”
Esta canción entonada por Ana Prada y Kevin Johansen podría ser la banda sonora de mi regreso a la vida real, si es que hay vida después de las vacaciones…
A la semana de mi retorno ya estaba necesitando irme a desconectar de nuevo… la turbulencia de los demás te puede llegar a devorar en un minuto y nuestras reacciones piden a gritos un nuevo descanso! Y ni hablar si, sin beberla ni tomarla, la vida te da un cachetazo y te deja culo para arriba chupándote el dedo sin saber a donde estas parado (o mejor dicho, caído, con el traste al descubierto)…
Todo eso y más me pasó apenas puse un pie de vuelta en la ciudad… Buenos Aires me mata!!!
“Balancearse / dudar / sin caer y sin poder cambiar de sitio…”

jueves, 8 de abril de 2010

PARA ILUSTRAR

No sé si me va a salir, porque no me entiendo muy bien con estas cosas... pero, encontré esto en You Tube y dije: lo tengo que publicar!!! Asi todos sabrán de que hablaba cuando hablaba de Parchis... y sobre todo de David!!!

Gracias Let y Na por los consejos bloggisticos... son lo mas!


miércoles, 7 de abril de 2010

VACACIONES EN LA PLAYA III - AMOR DE VERANO

Damián Santoro fue mi primer amor de verano…
Yo tenía 13 cuando lo conocí y él 15… Creo que fue, directamente, mi primer amor, más allá de la estación… mi primer enamoramiento… ese que te hace tener ganas de verlo, vergüenza al verlo, emoción por verlo… en fin, lo grafica siempre mejor el gran maestro gran, Mario Benedetti: “resumiendo / estoy jodido / y radiante / quizá más lo primero / que lo segundo / y también / viceversa”… eso representaba Damián para mi… ese primer sentir por alguien…
Ante todo, en ese veranillo tan lejano ya, Damián me ignoraba, lógico… Y yo no demostraba ante nada ni nadie que apenas me podía sostener en pie ante su presencia (no será mucho?! noooooo… así lo creía… y era parte de la magia, no?)… Nos fuimos acercando a través de unos amigos en común y no nos caímos bien al instante mismo de intercambiar las primeras palabras… Yo le debo haber parecido una loca de mierda – que ya lo era – y él a mi me pareció un idiota – que lo era, con nitidez y ahínco…
Los años pasaron y, como suele suceder, las cosas se complicaron…
Damián me sacaba de mis casillas… me gustaba mucho y me ponía muy nerviosa… pero, creo que lo peor era que yo no podía aceptar que ese nabo creído, agrandado y zaraza zaraza me pudiera mover un pelo a mi, a mi!!!
Una noche, finalmente sucedió… y nos dimos unos besos… No fue la situación más romántica del universo, por supuesto… de hecho, fue por una apuesta… No me viene a la mente lo que apostamos ni cuál de los dos finalmente perdió… pero, eso generó la situación, digamos… me acuerdo que estábamos en el auto del hermano de él, en el medio de la nada y me besó… y a mi me agarró un ataque de risa! Qué hace este estúpido?!, pensaba… Yo me había dado ya un “primer beso” y otros subsiguientes también, pero siempre dentro del marco del boliche, sin pasar siquiera a una tocadita de teta ni nada - eran otros tiempos -… Ahora, yo tenía 16 y otras cosas en la cabeza… Él 18 y una sola cabeza para todo! Después de la risa, vinieron las ganas… pero, seguía siendo Damián… estaba segura que si algo pasaba, se iba a estar mofando de eso al día siguiente, porque se caracterizaba por lucir su estupidez a los cuatros vientos… Así que, comportándome como una nena buena, le dije: hasta acá llegamos, el túnel está cerrado… No presentó oposición, pero, tampoco se conformó con el calor de los besos y prefirió devolverme a mi casa…
Después de eso, todo cambió… Cada vez que tenía oportunidad jugaba con mis sentimientos… y, después de muchas idas y venidas, un día le dije: chau, nos vemos en Disney!! Y se cortó…
Supe de él por conocidos, como supongo que él habrá sabido de mi… pero, nos perdimos el rastro casi obligatoriamente…
Hasta ahora…
Iba camino al supermercado cuando se me cruza un auto… al volante, Damián! Damián adulto, Damián se parte… Charlita de rigor, de esas en las que siempre está todo bien y no hay mucho por contar – después de casi diez años… jajaja, si fuera cierto, que patético!! Él estaba con una chica en el auto, a la que presentó por su nombre de pila, pero, por como me clavaba la mirada, era la novia, esposa o concubina…
Cuestión que “chau, che, que loco verte… estás igual y blablabla”… taza taza… Voy a hacer las compras y vuelvo a casa… Siento a Loli parla que te parla y cuando entro: upa lala el nene! Damián sentado, mateando, muy cómodo en el sillón… Amparo brillaba por su ausencia y Loli decide, justo, ir a bañarse… Bueno, a ver… what´s happening?!
Damián da unos golpecitos en el espacio vacío a su lado, como invitándome a tomar asiento… lo hago, pero en la silla, lo más lejos posible de su sombra… Mejor ponerle distancia, sé con que buey estoy arando… Se hace el conversador, se hace el disimulado y se va acercando, como un león… Sin escalas, me quiere comer la boca… Jajajaja, me río como una hiena, lo trato como una yegua… Pero, chiquitito, a dónde te crees que vas?!
Me regala un discurso que no le compro, pero, no le corto del todo el mambo, ya que muchas veces me pregunté qué hubiese pasado si… con él… Y, nunca es tarde para la revancha… Pero, voy a disfrutar el verlo arrastrarse un poco… Finalmente, se va, llevándose consigo el número de mi celular… Y bue… fácil, no, che, accesible!!
Al día siguiente, alrededor de la misma hora, manda mensaje a ver si pico… Mis amigas me ceden la morada y lo invito a merendar… muy remember de viejas épocas… cuando éramos los “Verano del ´98” del lugar…
Mate va, mate viene… se acabó la yerba… un “te acordás” por acá, una caricia por allá, besito robado, besito prestado, besito entregado… Nos atacó la vorágine del tiempo perdido y terminamos en el dormitorio prontamente… La pregunta… why?! Quién nos mandó a despertar esto? Por qué no pudimos dejarlo en la cuna del pasado, durmiendo tranquilito? Nadie me aviso que a veces a los “que hubiese pasado si”… seguía esto!!!! Qué desastre! La destrucción total de suposiciones que llevaban a buen puerto para esto! Para que me escupan la puta verdad a la cara!!! Si yo me hubiese garchado a Damián a los 16 años… no lo hubiese hecho nunca más!!! Hubiese pensado: si es esto, paso!!! Que horror!!! Qué desilusión!!! Que mal coge este pibe!!!
En medio del coito no pude evitar la risa, quería contenerla y se me piantaba un lagrimón… Y, para colmo de males, no sé qué película estaba mirando Damián, que me decía muy cerca del oído, impostando el tono de voz – como si fuese Gonzalo Heredia, pero le salía como Laport – o sea, basta de cosas desagradables! - : “Te gusta, no? Yo sabía que te gustaba así”… Noooooo!!! Despiértenme de esta pesadilla… Me va a seguir todas las temporadas diciéndome: “Sé lo que hiciste el verano pasado”!!! Acabate por favor y retirate de mi casaaaa!!! Me esforcé en pensar en otra cosa, en cualquier cosa con tal de poder concentrarme… concentrarme en la cara de Juan, o de Agustín, o de Mariano, o aunque sea en el trípode de Pamplona… algo que me permita no sufrir este momento… o no cagarmele de risa en la cara a este mamerto que se cree mil!
Gracias pánico por atacarme hace años, en ese autito, haciéndome pensarlo mejor… Gracias a vos no me cagué la vida… pero no por no conocerle la cara a dios a esa edad, sino porque si este muchacho lo hace así, con los supuestos años de experiencia, en esa época hubiese sido un calvario, me hubiese asustado demás y no habría querido ni nombrar la palabra sexo…
Nota: por supuesto, lo despaché y le saqué pasaje de ida nomás… byebye! au revoir! arrivederci! chaucito!

VACACIONES EN LA PLAYA II - MEME THE BOY

Yo siempre fui varonera…
Toda mi vida me llevé mejor con los varones que con las mujeres… voy a los hechos…
Durante la primera infancia mis relaciones eran mayoritariamente familiares, no había más que un círculo dividido entre la familia de mi mamá y la de mi papá… en esta última yo compartía el rincón infantil de las reuniones con muchos primos, pero con dos de ellos - varones, de la misma edad – era con los que me “tocaba” jugar… y no sólo jugaba a cosas de nenes, sino que me encantaba… tengo un recuerdo puntual: mi hermana jugaba con mis primas y las muñecas articuladas, mientras yo me deleitaba con mi primo y su barco de He Man… Del lado materno yo era la más pequeña de los primos… por ende, hacían conmigo lo que querían… y entre otras cosas, mis hermanos mayores y mis primas, jugaran a lo que jugaran ejercían su poder de superiores en el linaje y a mi me tocaba ser, por ejemplo, David de Los Parchis… Cómo sucedía esto? Simple… Mi hermana dirigía toda la batuta y seleccionaba los personajes: ella, primera, obvio, se autonominaba como Yolanda, la más linda del quinteto (ah, porque yo di por sentado que todos sabían de que hablaba cuando puse Parchis… ese grupito de jóvenes niños españoles que vinieron a robar acá y cantaban “parchis, chis, chis, parchis, chis, chis, es el juego de colores que cantamos para ti…” y filmaron películas, etc…); después, muy chupa medias, determinaba que mi prima mayor era Gemma, que a pesar de no ser tan agraciada físicamente como su personaje, era, básicamente, la otra mujer del conjunto… Mi hermano, por descarte, era Tino… Mi otra prima, a la que mucho no le estaba importando el juego, era el colorado de mameluco azul… Y yo era David, la “ficha blanca”… y el que mejor se movía, a mi criterio… Lejos de enojarme por mi suerte, me esmeraba en desempeñar mi rol con orgullo y gracia…
Fuera de la parentela, estaban los vecinos… y yo, si bien había varias niñas de mi edad, tenía un “mejor amigo”, al que manejaba a diestra y siniestra… Y con el que jugaba a las escondidas y a la mancha – nada de elástico, tan femenino…
Durante las temporadas de veraneo también solía enfocarme en el sexo opuesto… y no sólo tenía a mi amigo Juancito, que siempre hacía lo que yo proponía y era mi compinche, sino que me peleaba, como si fuera un pibe de potrero, con otros varones de la zona… Me encantaba jugar en los médanos, treparme a árboles y hacer carreras de lagartijas… Tomar el té con los bebotes… Mmm… te lo debo!
Yo quería ser como BJ, manejar un camión, viajando de un lado a otro, con mi chimpancé… Blancanieves? Blancanieves cuál era?! De terror lo mío…
A medida que el tiempo pasó, seguí teniendo el mismo modus operandi… Las nenas con las nenas, y Meme con los nenes…
Otro dato: 12 años… yo era parte del pre- equipo de natación de un club… donde entrenaba duramente bajo las órdenes de dos profesores del género masculino, junto a 10 compañeros… varones! Me acuerdo que en esa época me “hice señorita” y me quería matar! Le decía a mi mamá que no iba a volver nunca a entrenar, porque las veces al mes que faltara por el “asuntito” todos me iban a gastar… casi como si fuera maricón!
Durante mi adolescencia me costaba relacionarme con los hombres como eso, hombres… o, mejor dicho, verme a mi como mujer… Yo era uno más siempre! Y me resultaba muy fácil acercarme a los pibes desde ese lugar… pero nunca sabía cuándo y cómo comportarme como nena… y, gustar, como por decir algo…
El tema era cuando me quería salir de la zona del “amigo”… no sabía hacerlo… creo que aún hoy no he aprendido la táctica para conseguirlo… Y a su vez, a pesar de haber compartido tanto con ellos, haberlos analizado de cerca… aún no puedo con ellos, no logro entenderlos… son como jeroglíficos eternos…
No sé por qué me surgió esto estos días… quizá por mi relación con los hombres hoy por hoy…

VACACIONES EN LA PLAYA I - LA MARIPOSA

La otra mañana salí a caminar sola con Chavela. Íbamos las dos muy tranquilas, a paso lento, contemplando la paz del lugar, cuando de repente vi una mariposa hermosa, bastante más grande de lo normal, de colores otoñales… nunca había visto una igual, parecía muy campestre, algo salvaje… Pareció seguirnos unas cuantas cuadras y después se perdió de vista… Me dejó una linda sensación, no sé bien por qué… Hay algo de las mariposas que me atrae… No sé si será el hecho de que viven un solo día o el de que fueron orugas feas y pegajosas y se convierten en algo alado y bello… no sé, pero me gustan las mariposas…
Ese mismo día, por la tarde, salgo al patio y veo adentro del tacho de agua de Chave a esa misma mariposa (bueno, al menos en apariencia era muy igual, y como ya dije, no era común)… cuando me acerco un poco, me doy cuenta que está muerta… Me dio penita, pero… se sabe que no son eternas. Las chicas, a las que les había contado de mi cruce con ella en el paseo, me dijeron que la pusiera a secar al sol y me la guardara de recuerdo… Admito que me pareció medio macabra la idea, pero, era tan linda y especial, que la puse sobre la mesa del jardín para que Febo hiciera lo suyo…
Más tarde, paso cerca de la mesa y no la veo… pensé que se había volado con alguna ventisca o que alguno de los perros la había consumido como postre… pero, en eso levanto la mirada y la veo posada al lado de la ventana… Me acerqué y salió volando… Había resucitado?!
Fue muy extraño el episodio de la mariposa, por eso lo escribo… Tendrá algún significado?! Alguna señal oculta que no estoy sabiendo ver?! Escuché varias versiones sobre las mariposas y sus asociaciones… algunos piensan que tiene relación con los cambios, con la metamorfosis, otros con el alma y el espíritu de los que no están, pero te cuidan… Qué será?!
Que fue raro, fue raro… pero raro gratificante, así que pienso que sea lo que sea, se trata de algo bueno… Tal vez, esos vientos de cambio que tanto deseo…

RELATO DISCONTINUO DE MIS VACACIONES

Marianita, no me mandes carta a documento… acá está Meme de nuevo… I´m back! Ya se sabrá el por qué de tanta ausencia, pero ahora, sigo con mis vacaciones, que quedaron interrumpidas y por la mitad…
Al día siguiente de volver de Brasil, partí rumbo a la costa con Amparo y Loli, dos grandes amigas… Nos fuimos en el auto de Amparo, como si fuésemos una nueva versión de los Campanelli!!! Con varios bártulos, el perro de Amparo y mi perra… con las piernas inmovilizadas, pero con la panza llena de mate, música de ruta y unas sonrisotas inmensas en la cara!!
No fuimos muy afortunadas en lo que respecta al clima, debo decir… la mayoría de los días estuvieron nublados, otros soleados pero fríos y/o ventosos, y dos veces tuvimos que lidiar con la señora lluvia… pero, fueron unas vacaciones de amigas, de esas que una disfruta sin hacer nada en particular, solo compartiendo charlas y risas y cosas de chicas!
Con Amparo es la segunda vez que veraneamos juntas (la anterior fue el verano pasado) y con Loli hemos compartido varias temporadas, pero de más adolescentes…
Nuestros días consistían en levantarnos y… comer! Por suerte, Loli disfruta de cocinar – sino, Amparo y yo, si es por nuestro arte culinario, viviríamos a rotisería, pizza, arroz con atún, salchichas, tortilla – mi única especialidad – y pastel de papas – la única de Amparo - así que comimos bastante variado y sano, dentro de todo… Loli tiene esas cosas de madre, del detalle en la alimentación, de comer equilibrado… pero, tampoco faltaron los churros rellenos ni las picadas ni las facturas ni… la mar en coche! Sí, lo admito… comimos como si se viniese el fin del mundo… pero, y si se viene, que?! No nos vamos a ir al otro lado con una lechuga y un tomate en el estómago, no? Y, lógico, siempre está la bendita justificación para abrazarnos: “y bue, estamos de vacaciones”…
También hablamos mucho, hicimos sesiones largas de terapia grupal, analizamos a los hombres, los criticamos… Amparo está separada - ya tramitando el divorcio - y Loli está… cómo decirlo? No sé, porque ni ella ni su ex novio - aún compañero de cama varias noches a la semana – lo están sabiendo… Y mi situación ya la conocen… Así que sí, los defenestramos tanto como los añoramos… somos patéticas, somos mujeres… qué complicación!!
Yo analizaba… mientras ellas comparaban idas y venidas de la vida en pareja… viendo todo esto… sabiéndolo a ciencia cierta… qué hago buscando un hombre para instalar en mi vida?! No estaré mejor así? Solita? Mmm… Todo un dilema… Da para debate largo… y me da fiaca, estoy de vacaciones!!!!
Como el tiempo no es tiempo durante el período de descanso, lo despilfarramos a nuestro antojo y meditamos sobre cosas en las que uno ni piensa el resto del año… como por ejemplo, esas cosas típicas del disfrute vacacional costero que no existen siquiera en la ciudad… A saber: los churros… sí, uno puede llegar a conseguir en alguna panadería de capital un churrito perdido entre las tortitas negras, pero el churro, el churro como culto de la playa, con el señor que lo vende en su bicicleta o esas churrerías donde te lo rellenan a la vista… no lo ves en la gran urbe… por qué misteriosamente uno se pierde por esta delicia llena de grasa sólo cuando está con las patas en la arena?! Y los alfajores?! Quien entre el agobio del tránsito y el stress de la oficina puede encontrar en un alfajor un refugio? Quién puede pensar que un alfajor puede ser un buen regalo para alegrarle el día a alguien?! Nadiesssssss… Y, sin embargo, es el souvenir más requerido en cualquier balneario… La gente se lleva cajas para obsequiar como si fuesen virgencitas de Luján!!! Y los videojuegos?! Yo no creo haber visto, salvo en la época dorada de Sacoa, casas de videojuegos en las calles de Buenos Aires… Y que alguien venga y te diga al atardecer: “che, nos vamos a jugar unos fichines?!”…?! En cambio, en las cuatro cuadras que tiene el centro de mi lugar de veraneo, hay un video al lado del otro… repletos de gente… como si fuese la meca del Pacman o algo así… Esas cosas raras, que quizás nadie se pregunta… pero, nosotras estábamos bastante al pedo y además ligamos unas florcitas voladoras… y bue, ahí andábamos con estas preguntas existencialistas de poca monta! Igual, lo mejor, lo mejor… fue el análisis de la canción de María Elena Walsh… la clásica y aburrida “Manuelita”… Manuelita que tenía menos autoestima, la pobre… Cambiar por un hombre, lo peor que podes hacer, tortuguita! Y, el meollo del “listening and comprehension” llegó con la siguiente frase: “… con su traje de malaquita…” ¿? Que catso es “malaquita”?! Toda una vida cantando una canción sin saber siquiera si era una palabra existente, mucho menos sabiendo su significado… Para Amparo (está conversación la tuvimos nosotras dos, caminando por la orilla del mar con nuestros respectivos canes) se trataba de un tipo de tela, o sea, tenés el corderoy, la lycra y la malaquita… Para mi era como tipo de haraposita… digo, teniendo en cuenta el contexto de la canción… Como que se va crota a Paris para el extreme makeover… Finalmente, al llegar a la casa, le comentamos el asunto (el asunto, por favor, lo que es estar al gas) a Loli, quien nos respondió como quien da cátedra de algo: “La malaquita es un mineral, un tipo de piedra de color verde, que se asemeja a un caparazón de tortuga”… Ah, bue… esa la googleaste!!! Mira si vas a ir por el mundo sabiendo lo que es una malaquita… No te la cree nadie!!!
Y hablando de Google… o de Internet mejor dicho, ese fue un asunto difícil… Loli llevó su cositito de Internet móvil, pero no hubo caso, no enganchaba nunca… y fuimos una tarde a chequear los mails a un Cyber, pero… imposible! La conexión que ellos tienen es lentísima y es la única de la zona… Estás 15 minutos sólo para abrir tu casilla, un calvario! Así que por eso, anduve hiper lost durante los días que estuve ahí… pero, igual tenía mi laptop y me explayé en un Word… escribiendo estas boludeces y otras cosillas que acontecieron y leerán a continuación…