MEMENTO – SEGUNDA PARTE

Domingo 7 de Febrero – Contagio de energía
El domingo volvió el modem a la vida, pero mi máquina empezó a funcionar mal… genial! Sigo sin poder escribir…
Ofuscada con la tecnología, decidí revertir mi día y nutrirme de otra energía, de otra onda… Vengo con mucho chongo últimamente y estoy con la cabeza nublada… para eso, nada mejor que una buena dosis de “terapia de sobris”!!
Adoro pasar el tiempo con mis sobrinos… los niños tienen la capacidad de vivir el momento y nada más… esa capacidad que los adultos perdemos cuando empezamos a tener responsabilidades y problemas y más problemas… Se nos escapa la espontaneidad y vedamos toda posibilidad de jugar… Lo más lindo del universo: jugar!!
El domingo me di panzada de diversión e imaginación… nos disfrazamos, bailamos, cantamos, jugamos a las escondidas… potree como cuando tenía 7 años… estuvo buenísimo!!!
Lo mejor de todo: no pensé en nada ni en nadie, sólo disfrute y reí… fue mágico, amo a mis sobrinos que me quieren sin condiciones y con todas mis locuras al rojo vivo!!!
Cuando uno es chiquito siempre te preguntan: “qué queres ser cuando seas grande?”… Si a mi me lo preguntaran ahora, diría: “cuando sea grande, quisiera ser niña” :)
Sábado 6 de Febrero – Inestable
En algún momento, finalmente, logré dormirme profundo… y, para mi, a los segundos de conseguirlo, Juan empezó a acariciarme la cara tan delicadamente que me hacía cosquillas, siguió por mi cuello, mis brazos… Como para completarla, me daba besos sonoros, casi con la obvia intención de espabilarme… Si supieras lo que estás haciendo… De-tes-to que me despierten!!! Es la única cosa que me pone de muy mal humor por las mañanas… No soy de levantarme gruñona, todo lo contrario… pero, basta que mi mamá se ponga insistente con el teléfono, o alguien haga lo propio con el timbre, o quien quiera que sea que está en mi morada decida arrancarme de sopetón de los brazos tiernos de Morfeo… aparece el Increíble Hulk que hay en mi!!! Y no sé disimularlo… lo máximo que puedo hacer es no putear, no decir desde el fondo de mi corazón lo que siento… pero, te obsequio una cara de culo importante, mi mudez extrema y algunos refunfuños para responder lo que se me pregunte…
Así amanecimos el sábado con Juan… y no estuvo bueno…
Yo intenté eso de la intimidad que me dijo Greta, pero no podía recordar la fórmula… había una?! No sé, no puedo pensar cuando me despiertan!!!
Sólo quería que Juan desapareciera!!! Se ve que: opción A: se me notaba mucho, u opción B: Juan sabe leer las mentes de las personas… El tema es que se fue, terminó de masticar su tostadita (desayunó solo, porque yo cuando me empaco no quiero nada), alegó una excusa que ni recuerdo y salió por la puerta, después de darme un beso como si fuese un golpe y, luego de que yo le dijera, con menos onda que un renglón: “Está el encargado abajo, pedile a él que te abra”…
Así no, Manuela, así no… vas camino a ahuyentarlo… y no es eso lo que quiero?! No es lo que estoy buscando?! Para que quiero retenerlo?! Para que me rompa el corazón tarde o temprano?!
Recordé: cuando Greta me habló de intimidad, lo primero que sentí fue miedo… será un síntoma de algo?!
Viernes 5 de Febrero – Cosas que trae la lluvia
Sigo sin Internet en casa… qué embole! La tarde daba para sentarse a bloggear de lo lindo… lluvia y más lluvia, que no quería parar!
Como para que mi memoria no se dispersara demasiado, me puse a escribir todo lo acontecido en estos días en un documento de Word… y volé un rato…
“La lluvia llora incesante frente a mi ventana / el viento se queja de tanto en tanto / la luna intenta asomarse ente las nubes que cubren el cielo / del suelo se escapa ese perfume a tierra mojada que personalmente encuentro incomparable con cualquier otra sensación / ese aroma intenso que hace que se me erice la piel / poco a poco / de palmo en palmo / corro las cortinas para poder apreciar mejor la noche que se levanta ante mi / desde mi ventana me detengo a espiar ventanas ajenas / a imaginarme qué pasará del otro lado de esos vidrios fríos y mojados / entreabro mi ventana y dejo que la brisa y el rocío entren en mi cuarto / con la punta de los dedos toco la lluvia / jugueteo con las gotas entre mis manos / y pienso / siempre pienso…”
“Que nochecita para hacer cucharita, no?!”… sonó el mensaje de Juan en mi celular… y fue un perfecto final para mi arrojo de palabras sueltas…
A la hora estaba en mi cama, haciendo varias cosas hasta concluir con su propuesta inicial…
A mi personalmente no me gusta para nada dormir abrazada (le estoy cagando la máxima a un amigo, que ama generalizar las diferencias entre hombres y mujeres – un capítulo aparte, que merecidamente va a tener)… Así que, dejé que juegue al osito cariñoso y me apapache un ratito, y en cuanto sentí el cambio en su respiración (ese que te indica que está dormido como un tronco), me lo saqué de encima acalorada y fastidiosa… Y sí, soy asquerosita, cuál es?! Me gusta dormir cómoda, buscar la posición exacta para relajarme, y con un cuerpo en punto muerto arroyado sobre mi, no puedo!! Lo peor fue que cada vez que tenía oportunidad, Juan se dejaba caer sobre mi lado, acaparando mi almohada, tirándome del pelo, echándoseme encima… molesto!!!! Y para colmo de males: ronca!!! Noooooo… Que no descansé bien, no hace falta aclararlo, cierto?! Ufa, ufa, ufa…
Jueves 4 de Febrero – El juego de las coincidencias
El jueves fui a correr con Agustín, lo hice de manera natural… De hecho, él no me mencionó nada al respecto durante todo el día, bueno, en verdad, no me habló en todo el día, directamente… Pero, al llegar la hora de irnos, fui yo la que dije: “Nos vemos en un rato”… y a él se le iluminó la cara, no lo pudo disimular, sonrío medio de costado cuando se dio cuenta y asintió con la cabeza poniendo el rostro firme.
Mientras caminábamos entrando en calor, me puse en modo conversadora… y hablamos de todo un poco: descubrí que somos Alcoyana-Alcoyana en muchas cosas, pero también somos Capri-Yelmo en muchas otras… Él tiene un tema con el cuerpo, con el bienestar que excede mis límites… o sea, no me veo en unas vacaciones juntos, por ejemplo… Él madrugando para ir a correr a la playa, desayunando frutita y yogurt siempre, y mirándome de reojo porque yo decido dormir hasta pasadas las 11 y tomar mate con churros… Mmmm…
Al volver a casa e intentar conectarme a Internet, me di cuenta que mi modem no funcionaba… tampoco tenía teléfono (tengo el sistema de todo en uno)… un garrón… parece que la lluvia de ayer mató a mi modem… snif, snif… tenía ganas de escribir en el blog!
Miércoles 3 de Febrero – Into the deep
El miércoles volví a terapia! Greta volvió de su merecido descanso… que felicidad misma! Justo te me vas y me pasan todas! Será posible?! Sí… y muy… le conté todo lo más resumido que pude (ese es un gran problema para mi, que adoro sumergirme en detalles) y ella no paró de reír un momento… “Vos estás en una etapa de búsqueda y estás explorando el territorio, midiéndolo, no está mal eso… Pero, fijate que te aferras mucho al concepto que envuelve Agustín y, sin si quiera analizarlo, catapultas al perfil al que responden Juan y Mariano, que son bastante similares… y ese es el problema… estás trabajando con impresiones, con siluetas… lamentablemente, si tenés intención de intentar, al menos, tener lo más parecido a una relación con alguno de ellos, vas a tener que ahondar, que entregarte al submundo de lo profundo, del acercamiento… te lo digo despacito para que no te asustes: intimidad, de la de verdad”… Sin palabras… Uy, que miedo!
Después de quitarme de encima las secuelas de la tormenta del día, que azotó contra mi nuevamente, me perfumé todita y me fui rumbo a lo de Juan… Hicimos maratón de “Kill Bill”, comimos rico y hablamos de un montón de cosas, de la vida… Puse lo mejor de mi, Greta estaría orgullosa!
Juan trabaja de administrativo, no le gusta su trabajo pero tampoco lo detesta como yo al mío, toca la guitarra y ese es su verdadero sueño, aunque nunca haya hecho ni el mínimo esfuerzo por acercarse a él… ni siquiera tomar clases, es autodidacta… Es creativo y saca muy buenas fotos (hablamos mucho de eso, me dieron tantas ganas de volver a fotografiar como lo hacía antes)… Tiene la mirada de un niño pícaro y tierno, que hace lo imposible por esconderse detrás de la máscara que eligió para vivir su vida… Cada tanto destila un poco de dulzura – preferentemente cuando casi nadie esté mirando! Es básicamente un derroche de imperfecciones masculinas, un ya declaradísimo: cachivache!
Para el dead point de la charla llegó el helado y el sexo… que grata composición!
A las 4.30 de la mañana, disparé en un taxi para mi casa. Insistió en que me quede a dormir, creo que porque estaba seguro que yo no podía… igual a mi ego le gustó escucharlo!
Martes 2 de Febrero – Almuerzo acuoso + sorpresa = Mi día
La lluvia del martes hizo de mi hora de almuerzo una odisea… Casi todos salieron a almorzar a la misma hora, pero yo estaba entretenida organizando algunas opciones para mis vacaciones – aún no me decido; tengo 15 días a partir de la última semana de febrero – y lo fui postergando (y sí, cuesta dejar el vicio)… Cuando apenas puse un pie en la calle, camino a disfrutar de alguna rica comidita (o lo que tocara en el menú del barzucho al que voy cada mediodía – las otras opciones de la zona son resturantes que viven del turismo, o sea, demasiado caros para mi desinflada economía y un gallego que hace los mejores sándwiches de jamón crudo del mundo y otras comidas altas en calorías), el cielo se cubrió de nubes negras que no tardaron ni una milésima de segundo en dejar caer toneladas de agua sobre mi persona… Me sentí adentro de un dibujito de la Pantera Rosa! Con la nube caminando arriba mio! Puede ser?! Todos fueron y vinieron sequitos, y yo?? Ah, no… ahí va la looser esta a comer, a ver si con esto la convencemos de que se quede todo el día adentro a pura infusión, tedio y trabajo… no dejemos que se libere un instante para gozar de cualquier cosa que le pueda traer paz y placer! Qué te hice San Pedro, eh?! Qué es lo que queres? Que vaya los domingos a misa?! Olvidate, colegio de monjas toda mi vida, 14 años yendo los viernes a la misa en hora de clase, me canté Dulce Doncella miles y miles de veces con la misma intensidad que le hubiese puesto a Shoot to thrill de los AC/DC, tomé la Comunión, la Confirmación… yo estoy hecha! Por mi trona, diluvia, tsunamia, lo que más te guste… Yo me voy a comer… y no una tartita con una lechuga, me voy a comer una milanesa a la napolitana con una buena porción de papa fritas a lo del gallego de la vuelta y quedo pipona hasta mañana! Total con este día… no da para más que siestar entre las carpetas de la oficina!
La lluvia en Buenos Aires es terrible… pero, no por la lluvia en sí, sino por Buenos Aires… Las callecitas angostas del microcentro desaparecen… y uno de repente está caminando por la mismísima Venecia! Y encima ni un techito, no me pidas un techito porque no hay!
Yo le tengo alergia a los paraguas – algo que heredé de mi abuela materna – y no tengo… nunca me compré uno ni me compraré. Mi arma contra la lluvia es mi capita de Disney (es una capita de nylon amarillo con un Mickey atrás – adquirida en un viaje familiar a los parques de Orlando, con muchas tardes lluviosas), que te cubre de pies a cabeza… parezco un motoquero medio gnomo fana del Club de Mickey Mousse, pero me resguarda… se la re banca mi capita, loco!! Aunque todos la critiquen… También tengo unas botas de lluvia divinas, que me regalo mi hermana, que me permiten caminar chapoteando tranquilamente…
Todo el equipete, ese martes, lo tenía en casa… salí apurada y el día parecía estable… qué ilusa! Aún no aprendo que nada es estable en este mundo… Y así terminé: empapada mal! Horrible comer mojada… y encima tuve que volver, otra vez sopa!!!
Sequé el pantalón en el baño con el turbo de las manos, una compañera me prestó un suéter y anduve en patas casi toda la tarde… Soy un desastre!
Mariano me contó que se va de vacaciones el jueves, se va con unos amigos al Sur, en carpa pero a vivirla bien… así dijo. Me hace reír mucho y eso me gusta. Y no reír tipo de un tarado que cuenta chistes todo el día… sino de su manera de expresarse, como cuenta las cosas… Tal vez, se parece un poco a mi… aunque a su estilo. Imita las voces de todos super bien, eso me hace mucha gracia! Y cuando se enseria, es un pibe bastante centrado para la cantidad de porro que me da la sensación que consume. Estamos charlando mucho y, más allá de una atracción física, hay algo en él que me atrapa… Tengo que escaparme antes que sea demasiado tarde, no me tengo que olvidar que es el más grande de todos los cachivaches! Tengo que ser fuerte… ups! Cagué! Estoy al horno con papas…
Agustín me parece que se estaba haciendo el ofendido por lo del día anterior… No sé, no quedé del todo convencida en si su aislamiento se trataba de eso o de que Mariano estuviese rondando… Le teme a la competencia, cagón! Se agrandó Chacarita!!! Jajaja… Y bueno, che, si no me tiro flores yo… quién? Eso… quién? Alguien?
Alrededor de las 19.02 de ese mismo día, ya un poco me estaba arrepintiendo de haber cancelado el “entrenamiento” con Agustín… no se merece mi atención, no sé bien con exactitud porque no, pero no se la merece… y lo más triste: la tiene!
Es que… qué me queda sino? Hacerme la cabeza con Mariano? Que es del rubro “mejor perderlo que encontrarlo” – otra vez mi abuela, que le agrega un “mujer” al final que la completa, una genia!... Albergar cualquier tipo de esperanza con Juan? Que en cualquier momento me tengo que poner una foto suya a los hombros y salir a caminar aplaudiendo, que seguro termina perdido… Agustín es, quizás, un espejismo en el medio del desierto… pero, es lo más parecido a un hombre tangible que ando encontrando en el mercado…
Mientras meditaba sobre esto, me saltó un mensaje de texto… epa, epa, epa: sorpresa!
“Mañana a la noche: Tarantino + pizza y cerveza + mi casa= cita” – JUAN.
“Me encantó el combo. Por 50 centavos no quiere agrandarlo? Yo aporto el postre y el último disco del Cuarteto de Nos, que me dijiste no habías escuchado aún” – MEME.
“Compro, después arreglamos el tema de la paga, le parece?” – JUAN.
Y sí, claro que me pareció! Me quedé anonadada con esta aparición estelar… y muy contenta!
Lunes 1 de Febrero – Back to the office
El lunes de la semana pasada retorné al trabajo con la presión acomodada y la frente en alto… Mariano me hizo un par de bromas más al respecto y después me preguntó como estaba, si estaba mejor… y me dijo varias veces que me cuide… no me queres cuidar vos? (la piba insaciable!!!! No le basta con los mimos de Juan, los histeriqueos de Agustín y la salchicha con chucrut de Silva!… es que una tiene que tener varias velitas encendidas – eso me lo enseñó mi hermana, que es muy sabia –; el tema es que no se te arme un incendio incontrolable, no?!).
En fin, Agustín – ya que lo traemos a colación – medio se hizo el bobo, medio que me pareció que quizás es bobo… no sé, ese chico es un enigma, un cúmulo de suposiciones y dudas… Apenas si me dirigió la palabra en todo el día - haciéndose el ocupadísimo – y cuando se iba, me dijo, como amparándose en el clima húmedo que se pronosticaba para la semana: “Mañana, aunque se caiga el cielo, entrenamos igual, no?”… A ver, chiquito querido… primero que nada: “Hola, cómo estás? No me respondiste el mensaje nunca, pasó algo? Tu presión como sigue? Perdona que el viernes me porté como un nabo impresionable y hoy me hice el boludo jornada completa”… segundo: entrenamos??!!! No será mucho eso de entrenar?! Dar un par de vueltas al parque al trote no me convierte en una atleta olímpica ni nada remotamente parecido… Y, por último, si el cielo se cae, prefiero estar techo adentro que al descampado, sinceramente… Obvio, no dije nada de esto, sólo le respondí, a la velocidad que mi mente pudo inventar una excusa improvisada: “Mañana justo no puedo, tengo visitas y caen temprano y no hago a tiempo a hacer todo”… Creo que le mentí porque estaba enojada con él, sin pensar si al día siguiente me iba a arrepentir y a las siete de la tarde iba a estar echada sola en mi sillón deseando ver su espalda sudada al lado mío… Se estaba mereciendo el desplante y ya! Justicia se llama eso en mi mundo… Qué te crees, que porque sos lindo y encantador, caigo como mosca?! Eh??!! Eh??!! Tengo mi dignidad… muy desdignificada, pero la tengo! Él respondió algo que no retuve – de orgullosa ni lo oí – y se fue… que te garúe finito, nene!!!